martes, febrero 27, 2007

¿ES VÁLIDA LA PRIVACIÓN DE LIBERTAD?

En el blog de Giroaj encontré un artículo interesante acerca de un joven egipcio, musulmán de religión, que se encuentra preso por sus ideas y cuya vida peligra.
Cada sociedad se ha dado un catálogo de conductas prohibidas, cuya acción desencadena como consecuencia una pena, a veces pecuniaria, otras, privativa de libertad y, también, de muerte.
Para nuestras ideas occidentales, saber que en algún lugar del mundo existe un joven idealista que está encarcelado y tal vez a punto de perder la vida por tratar de reformar una cultura que a él le parece injusta, constituye una falta total de equidad entre la sanción y el mal causado, lo que me lleva a pensar en la importancia de la libertad, específicamente en este caso, de la libertad ambulatoria.
La que permite entrar y salir de casa. Ir al trabajo. Salir de compras. Pasear con los hijos. Caminar por la orilla de la playa, con los pies en la arena. Subir un cerro, una cuesta, una colina. Tomar un bus. Abordar un taxi. Viajar. Golpear una puerta en busca del ser querido. Son tantas y tan variadas sus formas que ni siquiera nos damos cuenta de lo que tenemos.
Y esto me conecta con el post anterior: creo que nadie pensaría que los presos, culpables o inocentes, están mejor tras las rejas, si se imaginara siquiera lo que implica no disfrutar, no usar y no disponer de la libertad.
Oremos por Karim, entonces. Que está enjaulado por decir. Encadenado por pensar. Pero nunca prisionero mientras conserve la libertad de su inmortal espíritu.

3 comentarios:

Carolina dijo...

Realmente la libertad es el don más preciado de los que la tenemos. Desgraciadamente cuando la tenemos no la usamos. Muchos vamos por la vida presos de nuestros propios miedos. Karim ha tenido el valor de hablar y defender su postura, eso es verdadera libertad, aunque en ello le vaya la vida...

fgiucich dijo...

Increíble, pero real. En este mundo que se precia de sus avances tecnológicos, la libertad es, todavía, un derecho amputado. Abrazos.

giroaj dijo...

Tienes razón. No valoramos bien lo q tenemos.
Qué manera más fresca de describir el disfrute cotidiano de la libertad!! Es solo poder hacer una vida "normal".

Y, aún así, como dice Carolina Muchos vamos por la vida presos de nuestros propios miedos.

Un fuerte abrazo guerrero!! :D