DUERME, MI AMADO HIJO.
Duerme, mi niño. La noche hará callar los grillos y las estrellas se instalarán en tu ventana... Duerme, mi niño, Dios ha inventado sueños que hablan de esperanza... Duerme, mi niño, confía en mi presencia: soy tu Luna. Te blindaré mientras creces y te guiaré por la Vida. Para ello, también seré Sol. Mientras, esta noche te acuno con ternura insaciable Pero mañana mi abrazo será fuerte, si temes. Es mi promesa: mi pacto de franca protección. Duerme amado hijo, mamá es ahora un atrapasueños emplumado. (supieras cuánto me cuesta dirigirme a mi cuarto). Un beso más, mi niño, otro más, aunque sé que no lo sientes (duermes). "Hasta mañana, hijo" aunque sé que ya no me oyes (duermes). Mañana... ¿Habrá un mañana? Quiera el buen Dios que sí, pues, de lo contrario, ¿quién se haría cargo de tus noches, de tus sueños, y de toda tu vida? ¿Y de las noches, los sueños y los planes de tu hermana? Es el constante temor irracional de una madre sola, y sólo la certeza de la fe puede disminuir esa angustia infinita... ... Hasta mañana... |
4 comentarios:
Como se nota el amor que sientes por tus hijos...
La verdad te felicito, das a entender con todo esto, que sos una buena madre y que queres lo mejor para tu hijo y tu hija....
Besos
Amigo:
Gracias por tus palabras. Creo en mis hijos y sé que son el motor que me impulsa a muchas acciones y a otras tantas omisiones.
Cariños:
Definitivamente, derramas amor a mares por tus hijos. Eso es hermoso. Quiera Dios, ellos te sepan compensar ese amor eternamente.
Serìa lindo que ilustraras tus post.
Amy:
Acepto tu sugerencia de ilustrar más a menudo. No siempre encuentro la imagen adecuada, en todo caso.
Gracias por tus palabras:
Olie
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