martes, noviembre 22, 2005

Pablo Javier


Pablo llegó a este mundo con gran enojo, el jueves 14 de agosto de 1997. Tras una inesperada cesárea, que interrumpió un trabajo de parto normal ante el enrollamiento del cordón umbilical en su cuello, nació llorando a gritos, con gran demostración y ostentación de su tono muscular y 4 kilos 50 gramos de peso. Se atrasó un solo día, pues la fecha probable de su nacimiento era para el 13.
A diferencia de su serena hermana, "Pablito" es un atado de vitalidad, enojo o alegría. Locuaz y chistoso, será el alma de todas las fiestas. Buen amigo de sus amiguitos y amiguitas, a estas últimas las protege y cuida.
Ama el dibujo y la pintura. Practica karate en YMCA, ya vivió su etapa de fútbol y de básquetbol y su nueva afición es el tenis. El pasillo de distribución que hay en el departamento donde vivimos, soporta, estrecho, los embates de sus prácticas.
Poseedor de una madurez poco común, es sorprendentemente intuitivo. Cariñoso y acogedor como buen exponente de su signo zodiacal (Leo), emprende con pasión todas las actividades que le cautivan. No tengo dudas que llegará a cumplir su meta: vivir en París y de su arte.

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